El otro discurso de Roberto: los que ama

 

El candidato tricolor a la alcaldía de Puerto Vallarta, Roberto González Gutiérrez, inició formalmente su camino al 01 de julio con un discurso que rompió los clásicos esquemas.

 

Hace unas horas, en la plaza del Pitillal, el maestro Roberto se desnudó completamente ya que inició su participación agradeciendo a todos aquellos seres que lo han acompañado en su travesía de vida.

 

Sandra García Cruz, su esposa, fue su primer inspiración.

 

“Gracias amor por estar aquí conmigo, en las buenas, en la malas, en las maduras y en las podridas, en los momentos difíciles, en los momentos que acerté, en los momentos que fallé, siempre has estado allí Sandy. Te amo, gracias, gracias mamacita”

 

Siguió Roberto, su hijo, estudiante de arquitectura a quién se dirigió en todo momento y prometió:

 

Alguien a quien no le puedo fallar siendo el ejemplo, a mi hijo Roberto Carlos, (…) gracias hijo, voy a hacer las cosas bien hijo, porque quiero que te sientas orgulloso de tu padre todo lo que me reste de vida”

 

Belem Gutiérrez, su madre, Julio, su hermano Raúl, Germán y Carlos, fueron mencionados también.

 

Y sí, de manera elocuente habló de sus propuestas, cambios, proyecto de ciudad sustentable e inteligente, de espacios dignos, cercanía ciudadana, pero caray, esa parte, esa pequeña parte en la que miró a su esposa, a su hijo, y les habló con el corazón, rompió todo esquema.

 

Durante los próximos 60 días conoceremos al político, hace unas horas conocimos al humano cuyo ser palpita al ritmo de los que ama.

 

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