Candelaria Tovar, equilibrio y esencia

Candelaria Tovar Hernández se ha convertido en la panacea, equilibrio y esencia de la política social y humanitaria del Davalismo Vallartense.

 

Su presencia histórica de la mano del ingeniero Arturo contribuyó a co-crear, prácticamente esos 50 mil votos que le erigen a Arturo Dávalos Peña como el líder político del municipio y la región.

 

Hace 3 años la describimos como una Patasalada voluntaria en el servicio social, esposa, madre, hermana, profesionista, maestrante, enfermera, quien desde sus escasos 14 años se focalizó en servir a los demás como rescatista de la benemérita Cruz Roja.

 

Es un hecho que a partir de entonces su proceso de aprendizaje no ha cedido y actualmente la maestra coronó su trayectoria de trabajo donde la multidisciplinaria labor le permitió “ser más consciente y responsable, porque con la vida y la salud no puede ni debe haber fallas” indicó.

 

Rescatando su mística de ser eje portador de buenas acciones y beneficios del gobierno para las familias Vallartenses, se suscribe vital retomar una entrevista con quien volverá a vivir la experiencia de ser nuevamente la primera dama de este municipio.

 

“El espíritu que mueve una profesión, como la de ser enfermera, tiene abundancia en paz interior, tolerancia, sensibilidad y mucho amor hacia las personas que la mayoría de las veces su mejor medicina es que alguien las escuche”, fue el prólogo de Candelaria de Dávalos.

 

Descripción –siguió diciendo- muy similar al de la función del DIF, con la diferencia que la demanda social del municipio tiene retos y condiciones particulares, cuyo énfasis sería incrementar los valores cívicos y morales que tanto aportan a la sana convivencia familiar.

 

En el intercambio de impresiones, el tema de las bondades del Sistema que encabezará tomó un cariz más técnico en donde certifica la personalidad de dicha institución.

 

Existe en todo gobierno un trabajo que va más allá del presupuesto para obra pública o servicios públicos; es el de una labor que produzca bienestar inmediato a las clases vulnerables como son menores, mujeres en posición vulnerable, las personas de avanzada edad, las cuales muchas son abandonadas por sus familias y que merecen ser tratadas con dignidad y respeto”

 

“Igual con las personas con los discapacitados que necesitan se abran más opciones para ser integrados a la vida económicamente productiva”

 

Al entrar a fondo a la fase del “cómo” estar en condiciones para hacerle frente a una empresa de tal magnitud, que requiere recursos independientemente de los programas sociales que maneja, indicó.

 

Con humildad hay que tocar puertas, conciencias y razones para crear programas preventivos sobre la explotación, en todos los sentidos de niños, y adolescentes”

 

“Bajar programas de todos los niveles de gobierno y fortalecer los ya existentes para apoyar a los nuestros. Ya no es suficiente, como durante años atrás se hizo, el proveerles únicamente una despensa, sino hay que dar una atención más integral”

 

Este ejercicio periodístico, entre buenos augurios y profundas reflexiones, el tiempo nos encaminó a esa parte sensible que la mueve.

 

“Como enfermera he visitado cientos y cientos de hogares, como promotora de salud también, donde me han regalado en breves minutos sus historias, recuerdos; esos vasos de agua que nos ofrecen a mis compañeros y a mí, muestran como el Vallartense es agradecido, compartido, solidario y generoso”

 

Cerrando este interesante encuentro con la afirmación: “Este será un ciclo lleno de Dios y trabajo en favor de Vallarta”.

 

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